miércoles, mayo 02, 2012

¿La nueva Sedena?
1.- En diciembre de 2006, el general Guillermo Galván recibió una Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) deficiente en lo operativo, atrasada y anquilosada en cuanto a material bélico, insuficiente para el cumplimiento de al menos una de sus misiones orgánicas fundamentales como lo es la seguridad de sus fronteras (como parte de la defensa del territorio nacional) y por ende en el combate a fenómenos como el crimen organizado en gran escala.
2.- El Estado Mayor de la Defensa Nacional (EMDN) elaboró un diagnóstico contundente sobre la situación de las fuerzas armadas que fue presentado por Galván legisladores federales en al menos dos ocasiones al inicio del sexenio, para que los políticos conocieran de primera mano y de boca de general secretario la grave situación en la que se hallaban las fuerzas armadas (sin contar a la Marina, que tampoco se salva del abandono y el atrás en todos los sentidos).
Obtener presupuestos sensiblemente elevados durante la administración calderonista para comenzar a modernizar a las fuerzas de tierra y aire, era el objetivo inicial del general Galván con esos acercamientos para dar a conocer parte de la realidad al interior de los cuarteles.
3.- No lo consiguió pese a los montos asignados y con los que casi duplicó los recursos con los que terminó el régimen priista (26 mil 987 millones 713 mil 087 pesos en 2006, contra 55 mil 610 millones 989 mil 782 pesos aproximadamente –sin contar el techo de endeudamiento autorizado para 2012 y los años anteriores–.