jueves, julio 23, 2015


Cielo rojo

Conversación con un militar que participó en operaciones antinarco en el norte del país.
1.- “¿A poco usté (sic) se enteró? ¿A poco usté (sic) supo algo de eso? No, verdá (sic)? Nadie supo. Así andábamos allá. Ahora es menos. Ha bajado un poco en el día, pero en la tarde, nada más cae tantito la tarde y se pone bien cabrón. Y en la noche todos chingan a su madre, ¿me entiende?
"Los que chingan a su madre son los malos, son la maña, sean o no de algún cártel. Los que chingan a su madre son los que creyeron que le habían partido la madre a los militares en algún enfrentamiento, en una emboscada, que en el norte son muy comunes y poco o nada difundidas por la prensa. No hay cómo. No hay quien se atreva. No hay quien te la publique".
No había entonces Operación Dragón. No había lineamientos o estrategia o procedimientos sistemáticos para operar en el Ejército Mexicano. Mucho menos había un Manual de Uso de la Fuerza diseñado para soldados y marinos.