martes, noviembre 17, 2009

Advierte Ejército acciones de EPR y ERPI en enero.

FOTO: LENIN CAMPO/ MILENIO SEMANAL.

La guerrilla en México y el estallido “oficial” de 2010

JORGE ALEJANDRO MEDELLÍN

El Ejército mexicano prevé actividad del EPR y el ERPI en los primeros dos meses del año entrante, y luego actividad guerrillera esporádica, pero sostenida, en Guerrero y Chiapas.

El 14 de enero de este año, durante una inusitada visita de los medios de comunicación a las instalaciones de la Base Aérea Militar Número Uno (BAM 1) en Santa Lucía, Estado de México, el comandante de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), general Leonardo González García, revelaba cuáles eran las dos principales preocupaciones del Ejército mexicano en el actual contexto de inseguridad: la guerrilla y el narcotráfico, en ese orden.

La declaración llamó la atención. Todos esperaban escuchar que la actividad de los cárteles de la droga constituiría la principal amenaza a la paz y la estabilidad del país desde la perspectiva del Ejército.

La preocupación de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sigue vigente. La dependencia continúa dándole seguimiento al Ejército Popular Revolucionario (EPR) y a sus escisiones, Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), Ejército Revolucionario Insurgente Popular (ERIP), Tendencia Democrática Revolucionaria-Ejército del Pueblo (TDR-EP), Fuerzas Armadas Revolucionarias del Pueblo (FARP), y el Comando Jaramillista Morelense.

Uno de estos grupos ocupa en especial la atención del Ejército mexicano: el ERPI, del cual se hace un seguimiento desde hace tres meses a una base de reclutamiento localizada en el poblado de Cruz Grande, en el estado de Guerrero. La base, ubicada por elementos de los Grupos de Inteligencia de Zona (GIZ) del Ejército mexicano, se encuentra en un poblado de la Costa Chica, en un triángulo formado por las poblaciones de Ayutla, San Marcos y Copala, a unos 120 kilómetros de Acapulco y a 100 de Pinotepa Nacional, en Oaxaca, zona de influencia del EPR.
(LEA MAS AQUÍ...)